(Romances neuróticos
en la era de las histerias posmodernas)
Todos somos zurdos
capitalistas hasta que se demuestre lo contrario
Autor: Ricardo
Garavito DN 23.968798
Escribir es espantar a la muerte o coger con
ella hasta la vida eterna. No se puede escribir sin coger ni se puede publicar
sin morir. Pero para estar realmente vivo hay que vivir sin temor a la muerte
ni a la nada. Soy argentino, coger no es agarrar, o en todo caso es agarrar a una
guacha de las nalgas y subírsela al pene a galopar por la madrugada. No se es
amable al coger, a lo sumo se es dulcemente salvaje, cariñosamente brutal,
cordialmente primitivo. El que verdaderamente se coje bien cojida a un mina, el
que realmente la satisface, sabe escribir textos que contienen una carga
cultural e ideológica barrial y profunda sin carecer de mundo en el aspecto no
burgués del recorrido.
Delfina –¿Qué estás
escribiendo Ricardo?
Ricardo –Boludeces
como sierre Delfi.
Delfina –Nunca escribís
boludeces.
Ricardo –No, solamente
hago boludeces, hay que ser muy boludo para enfrentar a las patotas de
corruptos que enfrento.
Delfina –Bueno, en eso
puede que tengas razón, pero nunca te vi escribir boludeces.
Ricardo –Esta vez sí
estoy escribiendo boludeces.
Delfina –¿Me dejas ver
un poco, a ver?
Delfina se puso a leer y yo me fui a echar un
meo al baño, terminé de mear, me estaba lavando las manos y la cara cuando
Delfina entró al baño a mear.
Delfina –Me
recontrameo, lavate tranquilo yo no te molesto.
Volví a la computadora con mi pen drive y
continué escribiendo.
El recorrido cultural
burgués del mundo y de la escritura es el de las rutas comunes, el de la
seguridad burguesa y de clase media lacaya, esa seguridad es también la de los
y las que “hacen el amor”, es que no saben garchar ni coger entonces ellos y
ellas lo que hacen es “hacer el amor”. El mundo de la pelotudez es el mundo de
los eufemismos morales burgueses y de clase media.
Delfina volvió del baño.
Delfina –¿A ver como
sigue?...Al hueso, directo, guacho hijo de puta, sierre metes el trompazo de
nocaut antes de seguir la pelea y el lector ya está sentado de culo en su
propia culpa burguesa y en la dualidad de su doble moral, impresionante tu
precisión.
Ricardo –La peor manera
de arruinar una larga amistad es garchando me dijiste una vez porque se te pegó
la frase d una serie americana o la descubriste en un libro de Bucay o en una
galleta de la suerte o en un chicle bazoka ¿y ahora me querés garchar Delfina?
Estalló en risas Delfina, y además
comprendió mi ironía, pero de todos modos no pudo evitar responderme:
–Puede ser, puede que
tengas razón que hoy tenga ganas de garchar.
Y volvió a reírse pero
me dio un abrazo.
Delfina –Voy a hacer
té de hierbas y de frutas ¿Queres uno?
Ricardo –Dale, acepto.
Es buena idea.
No hay nada peor que un burgués asustado,
salvo no tener tabaco y querer fumar y tener que ser agradable por cortesía con
gente que garcha mal. Por eso no debe faltar jamás alcohol y tabaco si se desea
escribir sobre hechos reales y si se desea recordar hazañas personales o
colectivas. Este texto narra una hazaña histórica sobre la cual está prohibido
tener memoria porque es un verdadero golpe al corazón de la bestia, un golpe al
sistema mismo. Ese sistema de domación, domesticación y represión de
individuos, ese sistema de clonación moral e intelectual que cría loros a lo
oveja Dolly. Ese sistema que aterrado de que se note la diferencia entre a
quien debe eliminar y a quien debe volver moda genera mano de obra editora
sobre lo que plagia y censura y que luego paga sicarios para perseguir
intelectos que no puede reproducir sin autodestruírse.
La mejor parte es que, contaminado el
sistema, se retuerce por dentro cuando comprende que la exposición de sus regiones
fagocitadotas de energías humanas hoy en día autodelatan a sus sirvientes y
mercenarios, a sus muchos sicarios, porque es tan atroz el crimen que deseaban
negar que siempre vuelven a cometerlo de nuevo en cada intento de ocultar como
funcionan.
Delfina –Traje el té.
Ricardo –Joia amiga,
alaha…jejeje
Delfina –¿Porqué decís
joia en vez de joya?
Ricardo –Es una ironía
fonética antirebaño, es tomar una frase vuelta frase de rebaño y que una vez
fue frase de barrio bajo y reempoderarla citando el 18 brumario cultural.
Delfina estalló en
carcajadas.
Delfina –Si no hubiese
estudiado ciencias políticas y mucho marxismo no hubiese comprendido la
humorada. Siempre me hacés reír cuando estoy mal y me levantás el ánimo cuando
estoy depre.
Ricardo –Pero
solamente por ambición económica o sexual lo hago y no porque seas vos ni yo
buena persona. Jejeje
Delfina se reía porque
ella no tiene un mango y tampoco magullada como estaba representaba a ninguna
modelo de Hoollywood. Y porque sabía que lo que yo hacía lo hacía porque es mi
amiga, porque la aprecio y porque ella es buena persona. Y se volvió a reír.
Delfina –¿Te quedas a
dormir así no me quedo sola?
Ricardo –Depende de
cuanto me pagues.
Nos reímos suavemente.
Tomamos Té, fumamos tabaco. Ella continuó leyendo, me hizo unas críticas muy
escuetas sobre como continué el texto pero también un elogio de la posibilidad.
Me preguntó sobre los tres títulos que coronaban el texto, le expliqué cual era
mi pan narrativo al respecto. En fin, se fue haciendo profundo el anochecer y
distante la tarde. O viceversa, distante la tarde al profundizarse el
anochecer. Lo que pasa es que incluso en cuestiones cronológicas uno debe
respetar la versión del otro o de la otra.
Delfina –¿Estás
enamorado de alguna mina últimamente?
Ricardo –De varias,
pero sólo de las más egoístas, crueles, las que padecen complejo de electra de
transpolación, de las más narcisistas y cobardes, y de algunas histéricas y
neuróticas más, además de alguna que otra que me idealiza al pedo pero que
desea ser rebelde con su familia y es buena gente dentro de todo, pero de
ninguna buena mina como sos vos.
Delfina –En serio
tarado.
Ricardo –En serio
jejeje
Delfina –¿No vas a
madurar nunca che?
Ricardo –No, ni en
pedo, Dios me libre y me guarde de que eso me ocurra a mí, duele demasiado y es
muy al pedo.
Delfina –Dale idiota
si sos ateo.
Ricardo –Cierto, pero
un ateo bastante zen, con cierta espiritualidad budista.
Delfina –Pero ateo al
fin.
Ricardo –Pero ateo al
fin. Envejecer no es madurar y madurar –el uso aquí dado a eso- es envejecer
dogmáticamente, es demasiado doloroso hacerse eso a uno mismo. ¿para qué vivir
muerto pudiendo morir viviendo de verdad, estando realmente vivo?
Delfina –En eso tenes
razón.
Ricardo –No sé si
tengo o no razón pero tengo mis razones de ser yo como soy.
Delfina –Igual yo te
quiero así.
Ricardo –Hay, qué
cosas tan bellas que dice usted, usted me sigue adulando, ¿no estárá intentando
cojerme? ¿Qué pretende usted de mí?
Delfina se cagó de
risa, escupió el té que estaba tomando, segundo té que se servía. Y me bañó en
té. Me hizo reír y a la vez se volvió a reír más.
Delfina –¿Nunca vas a
hablar en serio?
Ricardo –Me voy a
comprar una careta con el rostro de Feinmman el facho para que la gente me tome
en serio.
Se entró a cagar de
risa de nuevo.
Delfina –Creo que la
gente te toma mucho más en serio que a Feimman el facho.
Ricardo –Depende, la
gente me toma en serio cuando hablo en pija, cuando estoy vestido no.
Delfina se volvió a
reír.
Defina –Pará boludo,
no me hagas reír más que me duele la costilla.
Parece que el FMI siempre ataca por sorpresa y siempre pega donde más duele, el delito siempre ataca donde más duela, vamos a más testimonios.
jejejejeje
Lamentablemente, quizás para desgracia de algunas personas, vaya uno a saber porqué, uno tiene comprometedores videos de periodistas, de coimas, de policías y de feministas y narcos que serán muy bien recibidos, y es que yo así como estoy completamente en contra de violadores y abusadores, a la vez también lo estoy de narcos y sicarios ,) Que cosa terrible amiga ;) Eso es tan jodido como los atroces delitos que comete el personal de fm oktubres y otras radios y te voy a demostrar qué es lo que les cabe penalmente ,)
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